Por alguna razon las cosas salen como salen… y el día de hoy ha resultado más interesante de lo previsto.
Hoy visitamos Piacenza.
La ciudad se fundó en el 218 a.C. como colonia romana fronteriza contra las incursiones galas y ligures, con una población inicial de 6000 colonos. Sin embargo, pasaría a la historia por tener que hacer frente el mismo año de su fundación a la segunda derrota del ejército romano contra Aníbal en los inicios de la II Guerra Púnica.
El plano actual del centro histórico de Piacenza todavía mantiene la esencia de su fundación romana, aunque no se conservan restos significativos de ese periodo. Durante la Edad Media la ciudad mantuvo cierto esplendor al situarse como etapa en el camino de la Via Francígena
Hemos aparcado en un parking gratuito un poco lejos de centro. Al entrar andando en la población comprobamos que tiene un comercio activo, muchas tiendas de ropa, panaderías y pastelerías, cafeterías…
Llegamos a Piazza Cavalli, con las estatuas ecuestres de Alessandro y Ranuzzio Farnesio, barrocas y muy chulas, y el Palazzo Gotico.
Es un edificio medieval laico, de grandes proporciones y en buen estado.
La señora de la oficina de turismo, que está en el palazzo, nos informa de que las iglesias cierran entre 12 y 12.30, por lo que tenemos que darnos prisa… Estos horarios de los italianos son un sinvivir...
Visitamos la Iglesia de San Francesco, en la plaza de al lado. De estilo gótico lombardo.
A diferencia de muchas de las ciudades que hemos visitado en este viaje, aqui el Duomo está en una plaza diferente, también grande, porque quisieron separar el poder laico del de la iglesia. Resulta curioso ver como está totalmente pegado a casas y locales por muchos de sus lados…
Antes de que cierre nos da tiempo a ver la Basílica de San Antonino. En su organización original era una basílica paleocristiana de planta mas o menos griega. Luego le alargaron uno de los brazos, conviertiéndola en planta de cruz latina. Y pusieron el ábside en el extremo del brazo largo. Curiosa…
Las calles de la ciudad son tortuosas, con palacetes y jardines. Las fachadas de los palacios son muy bonitas, aunque la mayoría son privados y no se visitan.
Comemos debajo de la logia de uno de ellos, a la sombra… Debe ser un lugar muy popular entre los trabajadores de la ciudad.
Después de comer, nos acercamos al Palacio Visconti, que posteriormente fue de los Farnese. Está rodeado de un foso hoy seco y conserva un par de accesos medievales en forma de puente levadizo. Adosado a la zona medieval está la ampliación inacabada en forma de palacio renacentista. Hoy es sede de un museo.
Por la tarde nos acercamos a Pavía, que también resulta más sorprendente de lo esperado.
Fundada hace más de dos mil años a la margen izquierda del río Ticino, Pavía preserva aún hoy la característica ordenación urbanística regular del castrum romano
Situada en un entorno natural de gran valor, que se extiende desde las orillas del Ticino, con sus bosques de álamos, hasta las verdes colinas del Oltrepò pavese, la ciudad conserva su aspecto y encanto románico
El parking también está a un paseito y hace un poco de calor. Desembocamos en la Strada Nuova, que pasa por un lateral de la Piazza Vittoria. La plaza ocupa lo que fue la plaza de la ciudad romana, lindando con Strada Nouva y Cavour, que serían el Cardo y el Decumano máximos.
Es una plaza superagradable, llena de terracitas. Por debajo tiene un mercado subterráneo moderno. En uno de los extremos está el Broletto, pegado a uno de los laterales de la catedral. Hay varios palacetes en la plaza, todos con pórticos, que le dan un bonito aspecto, junto a las terrazas llenas de gente.
Por un extremo de la plaza, se accede al Duomo. Vista de lado es un revoltijo de absides, absidiolos , tejadillos, torres..., todo de ladrillo. Como tiene una micropuerta por la esquina de la plaza, entramos... El interior es muy sorprendente, todo blanco y muy luminoso. Fue diseñado por originalmente por Bramante con asesoramiento de Leonardo.... y se nota. Está toda revestida de mármol blanco. De proporciones y diseño totalmente renacentista de manual...
Salimos por la fachada principal. Como todas estas cosas que hacen los italianos, se la dejaron a medio revestir y está en ladrillo al aire. Pero me gusta....
Volvemos a la Strada Nuova, para bajar por ella hasta el río, sobre el que los romanos ya construyeron un puente en su dia del que sólo quedan la base. En la Edad Media lo mejoraron y en el renacimiento lo cubrieron con una especie de tejadillo. Hoy día está reconstruido porque resultó dañado en los bombardeos de la guerra. Es el Puente Coperto
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Desde la Strada Nuova se llega por una calle lateral a la Iglesia de San Michelle. Es una encantadora iglesia románica lombarda, un poco perjudicada por el tiempo, que ha hecho estragos en las maravillosas esculturas de su fachada... En ella se llevó a cabo la coronación de varios reyes. La fachada es toda de piedra, pero debe ser una piedra muy blanda, y están muy deterioradas. Pero aún así. ...
Por dentro también me ha encantado. Tenían una buena colección de capiteles. Quedan restos de frescos y de los pavimentos originales de mosaico, y un cristo medieval todo de plata...Y tiene cripta....
Volviendo a la vía principal y al otro lado está la Iglesia de San Teodoro, en el centro del barrio medieval de los pescadores. La iglesia, dedicada a uno de los protectores de la ciudad, acoge en su interior numerosos testimonios votivos: de los frescos románicos pintados sobre los pilares, a los ciclos pictóricos renacentistas de Sant'Agnese y San Teodoro, (siglo XVI), a la famosa "Vista de Pavía" de principios del XVI, extraordinario testimonio de valor topográfico del aspecto de la ciudad durante el Renacimiento. Notable es también la cripta al nivel entreplanta, con esculturas románicas y capiteles romanos de recuperación. Jolín, también muy chula. ...
En Pavía, como en Bolonia, también les dio por construirse torres inmensamente altas, de utilidad incierta. Les quedan tres enormes dentro de la universidad, también en la Strada Nuova.
Al final de la Strada Nuova hay un jardín y, en medio,otro supercastillo, el Castello Visconteo. Me encantan los puentes levadizos....
Este se concibió más como un palacio para albergar a la corte que como una fortaleza, por lo que resulta más elegante y menos contundente que otros de los que venimos viendo. La pena es que no abre por las tardes...
Nos tomamos una coca cola en una de las terrazas de la plaza., para recuperar fuerzas y recopilar datos...
Teníamos previsto terminar visitando la Certosa de Pavía, pero dada la hora y lo estupendamente bien que se está en Pavía, decidimos dejarlo para mañana.
Hoy dormiremos en un alojamiento rural que está en mitad del campo, por lo que decidimos llevar para hacer hacer picnic.
El Agroturismo resulta ser una encantadora granja, de la que parte funciona como tal y otra se ha adecuado como alojamiento. Está puesta con mucho gusto y los dueños son muy amables.
En resumen, creo que me gustan las iglesias románicas, las criptas, los mosaicos y los castillos con puente levadizo...
