El desayuno en el hotel ha estado bastante bien. El internet, no tanto, porque sólo va en la recepción....
Dedicamos la mañana a visitar Autun. Nuestra primera parada es la Catedral de Saint-Lazare, joya románica de la ciudad. Se trata de un templo de peregrinación erigido entre 1120 y 1146, según modelos de referencia de la época como Cluny o Paray-le-Monial. Entre lo más valioso destacan numerosas esculturas de Gisleberto de Autun. Es el autor del Juicio Final del pórtico oeste, obra maestra personalmente firmada por el autor. También de una interesante colección de capiteles, incluyendo una preciosa Huida a Egipto, los Reyes Magos, Eva... Algunos han sido trasladados al Museo Rolin, para su conservación.
Autun fue capital de la Galia romana, de lo que quedan numerosos restos por toda la ciudad y alrededores. Hemos dado un buen paseo para verlos.... Afortunadamente, el tiempo se comporta...
Quedan restos de la muralla del siglo I y dos de sus puertas, Porte d'Arroux y Porte de Saint André. Queda también un Teatro Romano.
Y el curioso Templo de Janus, de origen galo.
El musée Rolin está situado en un edificio del s.XV y alberga varias colecciones muy interesantes.
Las colecciones arqueológicas muestran el pasado galo-romano de la ciudad.
Vamos a comer a Bibracte. Bibracte fue la capital gala y galo-romana, hasta la fundación de Autun.
En el momento de nuestra visita se vende como un importante sitio arqueológico.... pero resulta un poco decepcionante...
El prometido restaurante de comida gala... resultó ser un autoservicio...ni original, ni demasiado variado. En fin...
Al sitio se accede en un bus desde el punto de recepción de visitantes y luego la visita es libre.
A día de hoy parece haber mejorado mucho, pero cuando estuvimos alli la mayoría de los restos están bajo una colina . Hay pocas zonas excavadas y la interpretación resulta compleja. Y tampoco proporcionan demasiada información...
Pero el entorno es muy bonito. Forma parte del Parque Natural Regional de Morvan y es un espacio protegido. Se trata de una colina, con unas bonitas vistas. Bajando alternan las zonas boscosas con pastos abiertos. Entre medias, están las zonas en proceso de excavación. Es un paseo muy agradable.
De vuelta al centro de visitantes, el recorrido continua por el Museo de la Civilización Celta. El edificio es muy original, cristal y cemento. La exposición es muy didáctica y trata de retratar el tipo de vida que llevaban los galos. La tienda tampoco está mal. Organizan muchas actividades didácticas, sobre todo para niños, y numerosas exposiciones temporales.
Volvemos a cenar a Autun. Digamos que las reseñas gastronómicas de este viaje son... confusas. Sólo pone que cenaron ensaladas, crepes y sidra, cerca de la catedral.
Nuestro Itinerario hoy: